Canarias tiene una de las infancias más pobres de la Europa política. El 35% de las menores que residen en las islas están malnutridas. Este dato, anterior a una pandemia devastadora, implica que su única fuente de alimentación viene de comedores escolares y becas de desayunos.
Esto significa que miles de familias no tienen con qué alimentar a sus hijas los fines de semana o festivos. Inspiradas en el Programa de desayunos diseñado por Los Panteras Negras en Oakland y Harlem (EEUU) a partir de 1969, la FAGC pone en marcha su propio Programa de desayunos.
Llevamos una década comprometidas con el frente de las necesidades básicas, a través de proyectos de vivienda y soberanía alimentaria. Entendemos que las comunidades se hacen fuertes cuando se acostumbran a gestionar y solucionar sus propios problemas.
Ante la ineptitud, incapacidad y desinterés de las instituciones frente a esta situación, agravada por las consecuencias de la pandemia y las guerras, lanzamos esta iniciativa que busca alimentar a decenas de menores a través de una nutrición saludable y sin sufrimiento animal.
No engañamos a nadie: lo que planteamos puede no ser más que una política de supervivencia. Pero es imposible cambiar las condiciones sociales si antes no aseguramos la supervivencia de nuestra gente, de nuestra clase y, especialmente, de aquellos que representan nuestro futuro.
Las anarquistas tenemos que hacer cosas anarquistas. Crear comunidad, tejer lazos desde la base, buscar salidas sin esperar nada de las instituciones. Apoyo mutuo y Acción directa no son lemas de cartel. Son metodologías útiles y prácticas a usar cada día, en cada relación.